MINIMALISMO Y MUJERES: ONCE ARTISTAS PIONERAS
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A la par que Frank Stella ya Carmen Herrera estaba trabajando en piezas minimalistas de una manera más pura. Es por ello que te invitamos a conocer a estas <11 mujeres minimalistas en el arte> que fueron punta de lanza en el minimalismo. Antes queremos repasar ¿Qué es el minimalismo? No todos lo saben y si lo saben se lo refrescamos. El minimalismo es básicamente ir a lo esencial y quitar lo que sobra. El término viene de la palabra inglesa “minimalism” engloba todo lo que por concepción simplifique a lo mínimo.
Seguro que Donald Judd y Robert Morris dieron en el clavo, fueron estos dos artistas los que están detrás del movimiento minimalista valiéndose de materiales industriales como el aluminio, el plástico o la madera y las formas geométricas simples, tridimensionales más inmaculadas. Judd lo plasmó en su ensayo “Specific Objects” en 1964. El primero que utilizó el término “minimal” por primera vez fue Richard Wollheim en 1965 causando expectación como la mini falda lo hacía a la par (y no por economizar tela, chiste malo).
Un pieza minimalista debe tener estas características: abstracción, concentración, desmaterialización, economía de lenguaje y medios (si a veces hay que ahorrar diciendo las cosas), geometría elemental rectilínea, orden (para todo en la vida es útil, así lo diría una madre ¿no?), purismo estructural y funcional, precisión en los acabados, reducción, síntesis y sencillez (menos es más). Sino mira como lo hicieron estas súper mujeres perseverantes.
MARY CORSE (1945, Berkeley, California, Estados Unidos)
Esta artista imbatible hasta nuestros días sigue trabajando. Se le asoció al movimiento “Light and Space” de los años 60’s sin conocerlo. Gracias a sus monocromos blancos, materiales ligeros como las cajas de plexiglás y sus luces fluorescentes. Mary Corse en 1968 llegaría un punto importante en la reflectividad gracias a las microesferas de vidrio que normalmente veía en los carteles de las calles.
Primero llamó la atención a mediados de los años 60’s con monocromos blancos de lona con forma y construcciones de caja ligera hechas de plexiglás y luces fluorescentes. Esto le permitió jugar y darle ese toque más sensorial a sus lienzos. Aunque las luces pueden sugerir exceso (nada minimalista) están compuestas por patrones geométricos como rayas anchas y viendo las piezas desde ciertos ángulos, la luz se mueve a través de ellos y da la sensación de que la superficie se diluye.

NASREEN MOHAMEDI (1937, Pakistan — 1990, India).
Se crio en India, estudió en Londres donde vivió 10 años, luego se muda a París y de allí regresó a la India para impartir clases en la universidad. Cuando sus contemporáneos hacían aún trabajos muy figurativos, Mohamedi se centraba en lo abstracto. Mediante monocromías elaboradas con tinta, grafito, gouache (acuarela) y jugaba con la perspectiva, profundidad y tridimensionalidad economizando los recursos gráficos yendo a lo mínimo.
El trabajo de Mohamedi (aunque se le asocie con el modernismo americano) se decantó por la no-figuración cuando en la India prevalecía la corriente de arte colonial. Se caracterizó por el rigor y se puede decir que por su estética sobria. Nasreen tuvo una búsqueda metafísica y mística en el desarrollo su trabajo.

CHARLOTTE POSENENSKE (1930–1985, Frankfurt, Alemania)
Posenenske, es una de las artistas alemanas más destacadas en los años sesenta. Sentía el arte como un medio de transformación social y crítica institucional. Una de sus series más conocidas es “Square Tubes” o “Tubos cuadrados” semejan a ductos de aire acondicionado industrial. Se decantaba por materiales como la chapa galvanizada, el cartón ondulado que le permitían recrear formas geométricas como si se tratase de módulos. Produjo en su mayoría escultura y en menor escala realizó dibujos y pinturas.
Charlotte tenía sus propias teorías en cuanto al mercado del arte y la creación artística. En su manifiesto (1968) dejaba muy claras sus convicciones e invitada al público a darle una nueva lectura a sus piezas recolocando o reorganizándolas como consideraban más adecuado. En sus propias palabras recalcó: “Hago series porque no quiero hacer piezas únicas para los individuos, para tener elementos combinables dentro de un sistema, para hacer algo repetible, objetivo y porque es económico” . Dejó el arte ese mismo año para convertirse en sociólogo.

CARMEN HERRERA (1915, La Havana, Cuba)
La artista cubana Carmen Herrera vendió su primera obra hace poco más de una década a la edad de 89 años. Tras haber pintado 60 años consecutivos, sus obras geométricas de colores brillantes estuvieron al margen de la escena cautivada por el género masculino. A sus casi 102 años de edad es una de las artistas cotizadas del momento. Carmen expuso sus obras junto a Piet Mondrian en 1940 y formó parte de la comunidad de artistas que exploraba los límites de la pintura y la escultura en París. Estudió en la Art Students League de Nueva York y estableció definitivamente en Manhattan en 1954. Desde entonces ha estado pintando y esculpiendo abstracciones geométricas.
Carmen continúa trabajando las formas planas y limpias en una escala limitada de colores brillantes como los minimalistas neoyorquinos. Sus obras junto a su personalidad cautivaron la atención del cineasta Alison Klayman dedicándole el documental “100 Years Show”, estrenada en 2015.

AGNES MARTIN (1912, Canadá — 2004, Estados Unidos)
La canadiense Agnes Martin fue considerada una de las maestras del minimalismo. Sus piezas abstractas se exhiben en museos como el Whitney Museum, la Tate Gallery entre otros. Tenía un estilo muy particular , se paseó por el expresionismo abstracto a un estilo más introspectivo. La mayor parte de sus lienzos se dividen en pequeñas celdas como especie de una cuadrícula de formas muy minimalistas. A través de su trabajo refleja sus inquietudes espirituales. Sus obras están cargadas de misticismo materializando su emotividad.
Para ella la simplicidad de sus obras se debe a las reacciones emotivas que provocaban. Se resistió a la etiqueta de artista minimalista, pero su obra era exquisita en simplicidad. En 1998 recibe la Medalla Nacional de las Artes que otorga el Congreso de los Estados Unidos. Pinto hasta el final de sus días.

NOEMI ESCANDELL (1942, Argentina)
La obra de Noemí Escandell se caracterizó por sus formas geométricas y frescas. Van más allá de la simple abstracción, tienen una carga política contundente en tiempos de la dictadura de Juan Carlos Ongania. Escandell fue parte del Grupo de Arte Vanguardista de Rosario creando la célebre protesta “Tucumán Arde”.
A esta artista no le fue posible exponer sus obras públicamente entre 1968 a 1983 cuando regresó la democracia a Argentina. “La ética funda mi estética” asevera Noemí y con ese fundamento juntando el arte con la política. Mimí (como le gusta que le llamen) juega con la madera y el relieve para dar paso a las formas mas elementales para la libre interpretación del espectador. Se basó en las formas sencillas y colores planos con guiños al pop-art.

JO BAER (1929, Seatle, Washington, Estados Unidos)
Esta artista americana curso estudios de psicología antes de dedicarse exclusivamente al arte a tiempo completo. Joe Baer se inició en el expresionismo abstracto en los años 50’s. A su paso por L.A. adoptó el vacío en sus lienzos dándole mayor fuerza con los bordes marcados. El blanco era su foco central y los bordes en forma de banda.
Joe usualmente exponía las piezas como dípticos o colocadas en el extremo inferior de las paredes. Sus obras son consideradas minimalistas también por las relaciones espaciales-positivo / negativo y ausencia / presencia por encima de la materia.
A partir de los 60’s simplificó aún más las formas geométricas, experimenta con enormes telas blancas o tonos grises, enmarcándolas con una especie de bandas azules, verdes y negras. La eterna lucha entre el negro y el blanco. Su obra muta y deja de lado la parte inferior de la tela. Baer se muda a Irlanda en 1975 con lo que pone un punto final a la abstracción. Optó por lo que ella misma denominó “figuración radical” un modo surrealista de pintar.

ANNE TRUITT (1921–2004, Estados Unidos)
Anne Truitt es una de las artistas estadounidenses más conocidas. Sin duda su obra fue un aporte muy importante para el minimalismo. Sus esculturas de gran formato fabricadas en madera pintadas con capas monocromáticas en acrílico como una especie de monolito moderno. La perfección de cada pieza conllevaba más de 40 capas de pintura acrílica, lijada en múltiples direcciones para crear piezas con acabados perfectos con creando planos de color.
Anne Truitt nunca tuvo interés en las técnicas industriales, por lo contrario era meticulosa con el trabajo manual en cada una de sus piezas. No utilizaba la laca pulverizada. Cada obra suya lleva una laboriosa producción pintadas a mano con la mayor precisión posible. Ella supo combinar la escultura y la pintura, valiéndose del color para crear formas y espacios. A través de su trabajo quiso dar al público una nueva forma de observar arte.

BEVERLY PEPPER (1922 Brooklyn, New York)
Una de las mujeres escultoras más conocidas de esta generación es Beverly Pepper. Sus piezas monumentales están presentes alrededor del mundo como arte público y los materiales que ha empleado son muy característicos de su estilo: acero, bronce y piedra. Esta artista lleva creando más de 50 años. En sus comienzos pintó y dejó los pinceles para dedicarse de lleno a la escultura después de un viaje a Camboya en 1960. La primera vez que expuso sus piezas fue en Italia junto a David Smith, Lynn Chadwick y Alexander Calder.
Algunas de sus esculturas hacen guiños a las premisas del minimalismo algunas por dejar a la vista la crudeza de los materiales con los que trabaja y otras veces por usar colores brillantes. Lo más importante era respetar esas ideas de vacío, masa, ausencia y presencia. La fundición o el reflejo del paisaje que rodea a las obras que crea es parte de su sello personal. Como diría la propia artista: “Invertir el espacio y llenarlo con el mundo que lo rodea” por eso es que sus piezas se exhiben al aire libre.

EDWINA LEAPMAN (1934, Hampshire, U.K.)
La artista británica Edwina Leapman, es una de las artistas que han logrado encontrar un equilibrio entre el minimalismo y los movimientos pictóricos de los años 60’s. Desarrolló su propio estilo y un lenguaje artístico muy peculiar. Sus pinturas siempre se han basado en la gestualidad de sus pinceladas, la densidad de sus líneas. Al principio sus trabajos eran más monocromáticos y fue mutando a la utilización de colores de una manera más activa.
Los trazos repetidos se diluyen horizontalmente en el soporte sin utilizar técnicas industriales en el proceso de las múltiples capas de pintura.

MARY OBERING (1937, Louisiana, Estados Unidos)
Caracterizada por usar materiales como las hojas de oro y los paneles de yeso inspirada en los antiguos maestros de italianos (influencias que no tienen nada que ver con el minimalismo). En los años 70’s dio un giro a su obra entrando en el movimiento vanguardista. Durante 40 años esta artista se ha paseado entre el minimalismo y la abstracción geométrica. Combina el juego de la luz y la perspectiva para poder ofrecerle al espectador diferentes puntos de vista. Sigue mezclando el huevo con las hojas de oros como en sus inicios.
Mary Obering logra en cada pieza una opacidad suave y en otras gracias a las pinceladas recrea texturas. Las superficies de sus obras tienen varias capas y planos de color. A lo lejos son unas auténticas joyas a los ojos del público. Algunos la ven más como maximalista que minimalista.

Mary Obering: Persol, 2003. Huevo, témpera y hojas de oro. Cortesía de Cnichols Project
Sin dudas todas unas mujeres de armas tomar (más pinceles, maderas o hierros) en cuanto a sus obras se refiere.
#GirlArtistPower